El actual director deportivo racinguista ha cambiado por completo la situación del club desde su llegada.
Fuente: Real Racing Club
El fichaje de grandes y conocidos veteranos del fútbol español (Jordi Figueras, Cejudo...) y de ilusionantes promesas (Buñuel, Enzo...), una bajada de precios en los abonos histórica y una pretemporada brillante, hacen recuperar la ilusión al mismo racinguismo que unos meses antes había caído en una depresión.
Llega junio y el Racing asciende en Son Malferit gracias a un tanto de Aitor Buñuel. Euforia cántabra. El Racing, cuatro años después vuelve al fútbol profesional gracias al combo formado por su director deportivo y su entrenador, Iván Ania.
Fuente: LaLiga 123
Tras la euforia del ascenso, toca planificar la plantilla del siguiente año, pero la dirección deportiva se encuentra un fuerte obstáculo: el tope salarial. El gran esfuerzo económico proporcionado en la confección de la anterior plantilla, sumado a la disminución de los ingresos por los abonos respecto a anteriores temporadas, hace que el Racing tenga uno de los presupuestos más bajos de la categoría, o incluso el más bajo, como al final acabó confirmando el director general verdiblanco, Víctor Alonso.
Pese a todo, el Racing inicia otro mercado veraniego más y vuelve a ilusionar a gran parte de su afición. Y es que la veteranía de Abraham, el carisma de Nuha, los genes de Luca Zidane y los ilusionantes fichajes de Moi Delgado y David Carmona, sumados a la posible llegada del prometedor central Javi Sánchez, no pasan para nada desapercibido. Todo esto, más los ingresos por Mario Soberón, Cesar Díaz e Iván Marcano, que aumentarán el tope salarial, hacen ilusionarse aún más al club más pobre, que sigue creyendo en quien le devolvió la ilusión, el Chuti Molina, la bendición del pobre.
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